Las esculturas de Thomas Röthel se crean a partir de un molde maestro columnar de acero macizo. Se utilizan pliegues, cortes, curvas y torsiones para crear esculturas de acero que parecen desafiar a la gravedad. Las correcciones son imposibles durante el proceso de creación, lo que hace que el enfoque del artista sea aún más meticuloso y planificado. No hay dos obras de Röthel iguales, cada una es única.